Modo de funcionamiento del láser.
Modo de funcionamiento del láser.
El láser con diferente longitud de onda y diferente modo de salida será absorbido por diferentes tejidos o sustancias después de entrar en la piel y, por lo tanto, producirá diferentes modos de acción. Estos tejidos o sustancias se denominan cromóforos.
La acción fototérmica se refiere a la absorción de la luz láser en la piel por parte de grupos de pigmentos específicos y luego convertida en energía térmica. Según la duración del pulso láser y el tiempo de disipación de calor del tejido de la piel, el calor puede extenderse a los tejidos circundantes y provocar una amplia variedad de calentamiento (por ejemplo, estimular el colágeno y rejuvenecer la piel); O el calor se concentra solo en un objetivo específico y el tejido objetivo se destruye por encima de una temperatura específica (p. ej., depilación).
La acción fotomecánica significa que después de que el láser entra en la piel, debido a la duración extremadamente corta del pulso, la expansión térmica extremadamente rápida del tejido objetivo genera ondas acústicas y produce un efecto fotomecánico, destruyendo así el tejido objetivo de forma mecánica (como roturas).
La fotoquímica se refiere a las reacciones químicas específicas que ocurren cuando un objetivo es iluminado por un láser para producir un efecto diferente. Un ejemplo típico de fotoquímica es la fotosíntesis en las plantas. En óptica cosmética, por ejemplo, algunos láseres de baja energía pueden inducir una reacción química en las células grasas para eliminar la grasa de ellas, reduciendo así el peso. La fotoquímica también es la base de la terapia fotodinámica (PDT) porque los fotorreceptores naturales reaccionan químicamente a la luz láser asociada.